04 de Mayo, 2011

Obama, Osama y un día de furia.

Apreté el botón de la puerta del garage de casa, exactamente a las 24:01 hs. Estacioné el auto como pude, voy a tener que pedirle de nuevo a Rodolfo que ordene la herramientas y las cosas de la moto, por que no hay derecho. No estaba con el mejor de los ánimos, tengo que ser sincero.

Ya entrando a casa, me crucé con el sereno, me miró y dándose cuenta de todo, me convidó con unos mates. Me parece una poronga el mate, pero me siento mejor persona cuando juego a que todos somos iguales. Una vez me pasó en el trabajo, que una compañera me ofreció mate y yo, medio por vergüenza y otro poco por sed le dije que si. La hija de puta había almorzado boquerones, cuando le entré al primer sorbo, sentí que le daba un beso al pulpo Manotas, que le chupaba los dedos al hombre de la Atlántida, que encontraba a Nemo y toda su familia. De ahí me quedé con idea, me parece que la humanidad ha evolucionado en tantos sentidos que lo del mate es como negar la rueda.

Nos sentamos con el sereno y sin preámbulos me tiró su hipótesis.

Sereno: Lo noto caído Esteban, tristón, ¿algún problema en el trabajo? ¿alguna señorita que le quita el sueño?

Yo: No, no es eso. Estoy preocupado... por un pibe del basket, Lucas. Lo sentí muy nervioso toda la noche.

Sereno: ¿Lucas? ¿No querrá decir Enrico?

Yo: Lucas, Lucas. Enrico estuvo diez puntos, increíblemente. Con esa manía de revolear la pelota cada vez que tiene que defender, cosa que a Mauro cuando pierden lo pone como el orto, pero cuando ganan le da gracia. Enrico estuvo..., a ver, volvió raro de Europa, están los que dicen que en España estuvo internado y todo. Pero empezó a ir al parque en la semana, practicar tirar al aro con desconocidos, mejoró muchísimo su efectividad, va a estar bien. Esta la paradoja al estilo Maradona o Charly, que no sabés si es mejor que estén bien o estén para la mierda, pero bueno no fue con el, el problema. El tema fue con Lucas.

Sereno: Me sorprende, un pibe tan simpático como Lucas.

Yo: Anda a saber. Llegó media hora tarde, apenas nos ponemos a jugar, me dice que me tiene que contar algo. No se. Quizás le molestó que no le de bola. Cuándo le pregunté, que pasaba, me dijo que había perdido la billetera, pero yo no soy tonto, algo más le pasaba.

Sereno: ¿No tendrá que ver con el Dumey? Según lo que se, bah, lo que usted me cuenta es muy conflictivo.

Yo: Es verdad, pero no, no creo. Al Dumey lo cruzo feo Mauro en una jugada. Mire, el Dumey es un tipo muy veloz, ágil. Realmente. Uno lo ve y se queda impresionado. Tiene su peso y cuando agarra velocidad no lo parás así como así. Y Mauro lo tocó abajo, imagínese. El tipo lanzado en velocidad y lo tocan ahí, le cruzan los dos pies. Se rompió el alma y dos baldosas. Desde el pisó hecho un moño le dijo a Mauro: "Quiero creer que no fue a propósito", Mauro le contestó: "Nos conocemos de toda la vida", una respuesta inquietante, pero quedo ahí.
Dumey es polémico, es como Vargas Llosa, tiene sus verdades, puede llegar a parecer un poco, cómo explicarlo, sus pensamientos, sobre la cosa política, pero con Lucas todo bien.

Sereno: ¿Quiénes más fueron?

Yo: A ver, el Pollo, que está muy débil para generarle problemas a nadie, no quiso sidra y no le gusto mi video, con eso te digo todo, es un exquisito del basquetbol, pero hay que tener códigos. El Gonchi, que pobrecito no puede con su alma, entre Central y que no caza una regla del juego, vive en un estado de permanente confusión, que no le da espacio para pelearse con Lucas ni con nadie.

Sereno: ¿El Yorugua?

Yo: Al yorugua, ¿que querés que te diga?, le tenemos miedo. Es un tipo muy justo, pero si se enoja por ahí te rompe los vidrios del auto a patadas. Si se calienta, mejor te quedas quietito, no decís nada y esperás que pase. En el partido, en un momento de extrema calentura, choreó una falta y nadie dijo nada, salvo Paposa, que es un oportunista, igual se supo corregir a tiempo, con un comentario para no creer: "LO DIGO PARA APRENDER" le tiró. Yo estaba tan cagado que lo agarré de la mano al Dumey, imaginate.
Después Nacho V., si bien estaba un poco apagado, imagino que por la pelea con Josecito el hermano de Enrico del último basket, no se va a pelear con Lucas. Lo vi un poco sombrío y errático, mirá que el tipo cuando tira al aro no falla casi nunca, estaba desconocido, pero de ahí a hacer algo para que Luqui este tan angustiado, no se, no creo, aunque quién te dice, pero no, no, olvidate.

Sereno: ¿Sufressi fue?

Yo: Suffriti, se llama Suffriti, si fue. Pero estuvo divino, nada para reprocharle, no fue su mejor partido pero no se peleó con nadie. Esta desarrollando una técnica, que se ve que practica en la casa, de lanzamiento al aro, medio amariconada, como de bailarina en cajita de madera, pero no creo que eso sea lo que le haya molestado a Lucas. Digo, cierto emputecimiento de estilo, no es algo para tomarse a modo personal, a no ser que yendo de una cosa a la otra te quieran garchar de sopetón.

Después esta Josecito, que esta totalmente loco, tiene el basket más intenso y físico que se vio en nuestras canchas, es leal y sonriente, pero te pasa por arriba. Y después esta el tema de lo que evidentemente trae de familia, aún siendo hermanastro, que es la técnica de revoleo de brazo para tirar la bola a la mierda. Era un ventilador de techo el hijo de puta.

El partido fue tranquilo, salvo por Mauro, que en un momento casi se va a las duchas antes, pero de pura costumbre. Hasta te puedo decir que estaba cariñoso.

Sereno: ¿Pero qué carajo paso entonces?

Yo: Lo de carajo, me parece un exabrupto.

Sereno: Perdoné me envalentoné en el fragor del relato ¿Qué sucedió entonces?

Yo: En una jugada aislada, yo accioné una cortina totalmente licita sobre Lucas, un tipo al que al margen de todo le tengo un grandísimo aprecio y respeto, y exploto, estalló. La verdad me sacó del partido, y me desbarranque, obvio, perdimos, pero hay formas y formas. Tengo un poco de ganas de llorar, ¿le molestaría?

Sereno: Faltaba más, venga ese abrazo.

Yo: Gracias (Snif)

Sereno: ¿Un besito?

Yo: Le doy la mano y se agarra el codo.

Sereno: Tiene razón, es que en el fragor... uno es de carne y hueso.